PRERREQUISITOS
Prerrequisito es una palabra que se suele utilizar en las auditorías de calidad y es la condición previa que tiene que darse
para que algo suceda. El prerrequisito necesario para que los refugiados sean
tenidos en cuenta es que los consideremos como algo nuestro, que nos
identifiquemos con ellos de modo que se pueda generar la empatía suficiente
como para que nos duela su dolor. Esa condición no se está dando. Por una parte
el seguidismo que se hace del mensaje de que los refugiados son terroristas
(¿los niños también?) hace que se rompa esa identificación. Por otra el
bombardero constante de imágenes nos abruma y nos paraliza. Finalmente la
atomización y la falta de movilización de la población hacen el resto. Cabe
preguntarse, ahora que sabemos lo que pasó en la Alemania nazi, qué haríamos de
estar en una estación donde parara uno de aquellos trenes de la muerte. Por lo
visto, teniendo en cuenta lo que está sucediendo con los refugiados, lo mismo
que hizo el grueso de la población alemana: nada.
La
perspectiva no es buena. Con el Brexit, con el blindaje de Hungría frente a los
refugiados y ahora con la llegada de Trump al poder se agudiza la
categorización de las personas según su origen. De las personas pobres, claro,
los ricos pueden proceder de donde quieran. Ahí está la propia esposa de Trump
para demostrarlo y no creo que Carlos Slim vaya a tener problemas con el muro
entre Méjico y EEUU que aquél quiere construir. Los prerrequisitos se complican
cada vez más.
En este
momento se está produciendo una tragedia humana ante las puertas cerradas a cal
y canto y rematadas con alambre de espino de Europa. ¿Y qué hacemos los
europeos? Votar a gobiernos que propician esa situación. Si funcionara la
identificación con los refugiados como lo que son, seres humanos como tú y como
yo, seres humanos sin más, surgirían iniciativas ciudadanas que obligarían a nuestros gobiernos a tomar medidas en su
apoyo. Mientras esa identificación no se dé, mientras exista la duda generadora
de parálisis, los refugiados seguirán siendo lo que han sido hasta ahora:
tierra, polvo, sombra, nada.
