DESATORNILLANDO GRECIA
No sé si Tolkien era un visionario, pero hoy vivimos bajo
una sola moneda que nos gobierna a todos. No sé si la Troika es Mordor, pero ha
traído mucho sufrimiento a Europa y esto aún no ha terminado. No sé si Montoro es Gollum, pero hay que ver
lo que se le parece. No sé quién será el
Sauron que nos gobierna en la sombra, pero existir, existe. Este Sauron europeo
pide ahora mayores sacrificios a Grecia en forma de desregulación del mercado
laboral, recortes en las pensiones, recortes en salarios públicos y subida de
impuestos en alimentos. Su crueldad no
conoce fronteras. El gobierno de Syriza resiste, ofrece un referéndum para que
sea el pueblo el que decida y por ello
ahora Grecia estorba, quiénes se creen los griegos que son para querer
gobernarse a sí mismos. Hay que desatornillarla y sacarla de Europa, a ella, a
Grecia, cuya mitología dio nombre al continente, cuya cultura nos dota de
identidad. Podíamos haber creado una Europa social, solidaria y cooperativa,
pero nos fiamos de la socialdemocracia europea y ahora caemos en que no eran
más que neoliberales de nuevo cuño (imagino que Felipe González no se habrá
convertido en lo que es ahora después de jubilarse) que unidos a los
conservadores sin disfraz nos han traído donde estamos. Los países europeos han
perdido su soberanía porque si no tenemos la potestad de mandar sobre nuestra
economía nos convertimos en esclavos sólo que no sabemos ni a qué amo servimos.
La amenaza sobre Grecia es un órdago sobre toda la Europa social, un aviso a
navegantes, ojito con lo que hacéis o seguiréis el destino de los díscolos
griegos. En su bellísimo discurso de esta semana, Tsipras apela a la soberanía
y a la dignidad del pueblo griego para que no se deje arrebatar lo que le queda de democracia. Sé que Tsipras no es Frodo, pero deseo de todo corazón que
sea capaz de librar a Grecia del anillo maldito.
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