November is coming
Cualquiera diría
que nos quedamos sin fuelle cuando más falta nos haría apretar los
dientes y empujar con fuerza. November is coming, es más, November está a la
vuelta de la esquina, o más cerca si finalmente este gobierno Pp de nuestros
pecados decide adelantar las elecciones a Septiembre, como vengo escuchando
últimamente. Mientras tanto una apisonadora alemana ha pasado por encima del
espejo griego en el que hemos creído ver un reflejo ilusionante no sólo para
España sino para toda Europa. Los restos de ese espejo hecho trizas nos devuelven una realidad
fragmentada y confusa: la humillación a Grecia ha sido una bofetada en la
mejilla de la izquierda española que, al mismo tiempo, parece haber perdido la
brújula podemita. Pues amigos y amigas, hay que recuperar con urgencia el
terreno perdido porque Noviembre, al paso que va esta burra, no nos augura nada
bueno. Los meses ilusionantes que pusieron a la izquierda en el mapa de la
gobernabilidad vinieron precedidos de muchísima actividad en la calle y supongo
que por ahí pasa la recuperación de aquello que creímos posible y que estoy
convencida de que lo sigue siendo. La otra pieza del puzzle es la confluencia,
a la que se resiste Podemos, pero sin la cual habrá pocas esperanzas de cambio.
En esta época de globalización y de internetización los tiempos de la política
son tremendamente cortos y han bastado unos meses, un par de errores tácticos
por parte del principal actor que es Podemos y la introducción con calzador
mediático de un partido transformer (es lo que Vds. quieran que sea...) como es
C's para que el panorama haya cambiado
con un efecto pendular, devolviéndonos casi al punto de partida.
No podemos, no debemos dejarnos ganar esta mano o lo
pagaremos durante años. Las claves son calle y confluencia. Think of November…
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